jueves, 2 de marzo de 2017

El Padre Báez defiende a Drag Sethlas aunque comparte las palabras del obispo

El controvertido sacerdote Fernando Báez, conocido popularmente como el Padre Báez (párroco de barrios de medianías y cumbres de Telde como Lomo Magullo, La Breña y Cazadores), se pronunció este miércoles sobre la polémica actuación del Drag Sethlas, ganador del Carnaval 2017 de Las Palmas de Gran Canaria y que salió vestido de una virgen y jesucristo al decorado de Santa Catalina.

El Padre Báez, que aún no ha visto la puesta en escena del joven Borja Casillas en su totalidad, defiende la actuación aunque, al mismo tiempo, también comparte el duro comunicado que ayer emitía el obispo de la Diócesis de Canarias, Francisco Cases Andreu. Un escrito en el que el prelado canario critica “la frivolidad blasfema" del espectáculo de Drag Sethlas, alude a celebraciones religiosas multitudinarias como la festividad del Santo Cristo de Telde e incluso asevera que la actuación del joven Borja Casillas le ha generado más tristeza que el accidente aéreo del vuelo JK-5022 de Spanair que en 2008 se cobró la vida de 154 personas al poco de despegar desde el Aeropuerto de Barajas.

En unas declaraciones que esta mañana ofrecía a Gran Canaria al día, un magazine que Ibán Padrón dirige en Eco Radio Canarias, el sacerdote Fernando Báez abogaba por quitarle hierro a la polémica abierta a raíz  de la actuación de Drag Sethlas.


Sin morderse la lengua, algo que caracteriza a este atípico y televisivo cura que este año se subió al escenario carnavalero de Santa Catalina para protagonizar una de las canciones de la murga Los Legañosos, Báez tildó la actuación de “anécdota”, “incidente gracioso” y hasta “simpático”, aunque sí que reconoció que fue algo irreverente. “La primera vez que la vi pensé, hasta bonita está”, señalaba el sacerdote, quien también dijo que la actuación no le quitó “ni la paz ni el sueño” porque tiene la convicción de que Borja Casillas no quería hacer daño. “La verdad que me ha dado hasta pena, pero no de él, porque yo creo que el chiquillo lo hizo con buena intención, porque es lo que se hace en los Carnavales”, agregaba.

El cura sostiene que Borja Casillas ha pedido perdón y que no ha tenido la intención de molestar. “Yo creo que en el fondo hasta ha sido respetuoso y eso hay que tenerlo en cuenta”. “Comprendo que cometió un pequeño fallo, pero aquí nadie es perfecto. Ni el Papa. Todos tenemos debilidades y faltas. Pedimos perdón y aquí se acabó todo. Lo hecho, hecho está. Hay que pasar página y seguir adelante. Tratando a Borja con cariño y amor cristiano”, apostillaba.

Así, también afirmó que “blasfemias hay por todas partes” y que este episodio no es más que una “mínima gota de agua” que no tiene por qué afectar a una institución tan importante como la Iglesia.

“Más que fijarnos en esa imagen de la Virgen, un poco irreverente, tenemos que dejar a la gente que viva y que haga lo que quiera. Hoy sería bonito que estuviéramos hablando del miércoles de ceniza, que comienza la Cuaresma”. “Que no se pasen y que respeten la fe y a los creyentes". "A mí no me afecta que un señor en la calle blasfeme, allá el con su conciencia”, añadía.

Una Iglesia menos conservadora e integrista y más reivindicativa
Fernando Báez también se ha mostrado en contra de que la Iglesia tenga una visión tan "conservadora", "integrista" o "troglotida". En este sentido, defiende que la Institución cristiana tiene “un mensaje mayor que dar” y “una mayor preocupación por la injusticia, el abuso, el paro, la desigualdad o las corruptelas políticas. “A mí lo que realmente me preocupa es el paro, que tengamos la tierra vacía de animales y agricultura, que dependamos del mundo exterior. Esta es mi gran preocupación y soy sacerdote", ejemplificaba.

Ahondando más en las palabras de Cases Andreu, el sacerdote, manifestó que las hace suyas, pero que también se da cuenta de que a lo mejor se le está dando demasiada importancia “a un hecho insignificante”. Del mismo modo precisó que “el obispo, por más que sea obispo, no deja de ser una persona. Una persona sensible que tiene un momento incluso hasta de impulso, de impresión, motivado por las circunstancias”.

Para concluir, Fernando Báez también se mostró en contra de la campaña que el colectivo ultracatólico Hazte Oír viene desarrollando en Madrid con una guagua que muestra mensajes transfóbicos. “Hay que respetar la condición de cada persona, y en esto hay que ser casi sagrados. Dios es padre de todos. Yo a esa guagua no le pondría una bomba, pero le pondría un freno", aseveraba.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario