Los premios fueron sólo el final de una noche para el recuerdo que arrancó a las 21.00 horas con la obertura del Carnaval Con parche, garfio y a lo loco, un colosal espectáculo que durante algo más de un cuarto de hora transportó a los espectadores a diferentes escenarios dignos de una película de corsarios. No faltaron sobrecogedoras escenas de acrobacia, canciones y coreografías en las que participaron más de 250 personas entre figurantes, bailarines, grupos del carnaval, las murgas Declaradas y Los Lengüetudos y un grupo de miembros del taller de animación del Ateneo Municipal.
Tras el espectáculo de arranque y la actuación de la comparsa Aragüimé, Yaneli Hernández se hizo dueña y señora del escenario para saludar a las autoridades, presentar al jurado y dar comienzo a lo que el público esperaba ansioso, el desfile de las drags candidatas. Una a una, las aspirantes a reinona fueron recorriendo el escenario con sus actuaciones. La primera, Drag Vulcano, que tras vencer en la gala drag de Guía lucía el diseño de Javier Pérez Mateo Me tiene negra.
Sólo tres minutos después Drag Chuchi hacía suyo el escenario para lavarle la cara a los envidiosos al ritmo de la canción Se dice de mí, que también servía como título para su diseño, confeccionado por Miranda Cottons. Drag Múlciber llevó al Víctor Jara un espectáculo efectista y provocador, en la misma línea oscura que se ha convertido en su estilo personal, titulado El conejo me dejó como una perra y creado por Borja Ferrera.
La Tullida tomó el relevo con su Aunque la Bella se vista de seda, marica se queda, con el que le dio un hilarante giro al mundo Disney. Tras ella, Drag On cerró el primer bloque de participantes marcando el ritmo con su Simplona, la banca siempre gana diseñado por AD Creativas.
La actuación de La última llave sirvió como descanso entre el frenético ir y venir de drags antes de que Ziben convirtiera el escenario en un expediente X con los Seres de otro mundo creados por Jonay Espino. A continuación Drag Noa se mimetizó con el tema marítimo del carnaval convertida en Popeye al ritmo de ¡Arriba mari? neros!
Drag Sethlas, vencedora de la gala drag de Las Palmas de Gran Canaria, demostró que lo suyo no es flor de un día con un diseño bastgante pitufo creado por Óliver Benítez. Justo después Drag Kiova presentó el muy tribal Olorum.
Drag Sheychelss revivió por unos minutos a la legendaria familia Addams al ritmo de batucada con su ¡Mira tú que cosa!, diseñado por Jorge Pérez. Fue la penúltima antes de que Grimassira Maeva llevara al escenario su hit de 2017, Pompón, que logró poner en pie al público cuando llegó el momento de los aplausos.
Tras la última actuación las once drags se retiraron para que el jurado deliberara y Yaneli Hernández se marcara un monólogo. Se acercaba el momento decisivo, pero antes actuó Blas Cantó, que durante 10 minutos sorprendió al público por su absoluto dominio del escenario. Para entonces, en torno a las 23.30 horas, la suerte estaba echada: ya sólo faltaba celebrar la victoria con la ganadora.
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