La
asociación de vecinos Triana-San Telmo ha presentado alegaciones al
calendario de las fiestas del carnaval de Las Palmas de Gran Canaria en
un escrito en el que plantea la posibilidad de que las fiestas de día en
el casco histórico incurran en un supuesto caso de «ocupación ilegal de
la vía pública».
El documento enviado al Ayuntamiento capitalino advierte de la «falta de referencia a la limitación de los espacios» donde se celebra el carnaval de día los días 15, 22 y 24 de febrero. La presidenta de la asociación de vecinos, Pepa Sánchez, asegura que el hecho de no delimitar la zona de ocio convierte «la fiesta de carnaval en un deambular por todas las calles de Vegueta y Triana, con la generación de basuras orgánica e inorgánica que eso supone, botellones, etcétera».
Por eso, concluye la representante vecinal, se podría producir un incumplimiento de la ley de actividades clasificadas y espectáculos públicos, que obliga a delimitar espacios y y horarios concretos en los actos de participación popular en las vías públicas. «Tal y como están anunciados los días de carnaval en Vegueta y en Triana puede afirmarse que se trata de ocupación ilegal de la vía pública», sentencia el escrito.
Las tres fechas a que hacen mención las alegaciones están contempladas en el programa de actos del carnaval de este año. La primera es la del sábado 15 de febrero, que se celebra a partir de las 12.00 horas bajo la denominación de Carnaval de Día. En la página web de la fiesta se explica que la fiesta se circunscribirá a las calles Obispo Codina, Calvo Sotelo, Pelota, Mendizábal y Mesa de León.
La segunda es también un sábado, el 22 de febrero, y se convoca a la participación, a partir de las 12.00 horas en la calle Mayor de Triana, con el título de Carnaval Familiar.
La tercera cita es el lunes 24 de febrero, a partir de las 19.00 horas, en el barranco del Guiniguada, entre el teatro Pérez Galdós y Muro con Obispo Codina. Es el llamado carnaval tradicional, que sigue la tradición palmera de los polvos de talco.
Para los vecinos, esta última práctica «supone un riesgo de caídas, con distintos grados de gravedad en relación a la edad de las personas y forma de caer, dado el carácter resbaladizo del suelo en contacto con esta sustancia». Además, critican que la fiesta «lleva aparejado la inhalación pasiva e involuntaria de polvos de talco». Por si fuera poco, el despliegue de limpieza organizado por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria el año pasado agravó, en su opinión, esta situación. «Fue altamente perniciosa tanto para quienes la efectuaron como para los residentes», exponen porque el sistema utilizado volvió a remover el polvo de talco que se había depositado en la calle.
Ellos proponen que se utilicen aspersores a modo de aspiradoras para retirar el talco y luego ya emplear agua.
En cualquier caso, la asociación de vecinos Triana-San Telmo considera que la celebración del carnaval en el casco histórico de la ciudad lo deteriora y lo degrada. «Hablamos con la experiencia acumulada en los últimos años», asegura Sánchez en el escrito, «es una sucesión de botellones realizados en sus calles hasta altas horas de la madrugada, con el añadido de basuras de todo tipo tiradas por sus calles, otras drogas, vomitaduras y meadas en las calles y portales de edificios, en su mayoría nobles, catalogados como Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Canarias».
Los vecinos reclaman información también sobre las medidas previstas para garantizar que el derecho al descanso sea compatible con el ocio y esparcimiento ciudadano.
Javier Darriba
El documento enviado al Ayuntamiento capitalino advierte de la «falta de referencia a la limitación de los espacios» donde se celebra el carnaval de día los días 15, 22 y 24 de febrero. La presidenta de la asociación de vecinos, Pepa Sánchez, asegura que el hecho de no delimitar la zona de ocio convierte «la fiesta de carnaval en un deambular por todas las calles de Vegueta y Triana, con la generación de basuras orgánica e inorgánica que eso supone, botellones, etcétera».
Por eso, concluye la representante vecinal, se podría producir un incumplimiento de la ley de actividades clasificadas y espectáculos públicos, que obliga a delimitar espacios y y horarios concretos en los actos de participación popular en las vías públicas. «Tal y como están anunciados los días de carnaval en Vegueta y en Triana puede afirmarse que se trata de ocupación ilegal de la vía pública», sentencia el escrito.
Las tres fechas a que hacen mención las alegaciones están contempladas en el programa de actos del carnaval de este año. La primera es la del sábado 15 de febrero, que se celebra a partir de las 12.00 horas bajo la denominación de Carnaval de Día. En la página web de la fiesta se explica que la fiesta se circunscribirá a las calles Obispo Codina, Calvo Sotelo, Pelota, Mendizábal y Mesa de León.
La segunda es también un sábado, el 22 de febrero, y se convoca a la participación, a partir de las 12.00 horas en la calle Mayor de Triana, con el título de Carnaval Familiar.
La tercera cita es el lunes 24 de febrero, a partir de las 19.00 horas, en el barranco del Guiniguada, entre el teatro Pérez Galdós y Muro con Obispo Codina. Es el llamado carnaval tradicional, que sigue la tradición palmera de los polvos de talco.
Para los vecinos, esta última práctica «supone un riesgo de caídas, con distintos grados de gravedad en relación a la edad de las personas y forma de caer, dado el carácter resbaladizo del suelo en contacto con esta sustancia». Además, critican que la fiesta «lleva aparejado la inhalación pasiva e involuntaria de polvos de talco». Por si fuera poco, el despliegue de limpieza organizado por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria el año pasado agravó, en su opinión, esta situación. «Fue altamente perniciosa tanto para quienes la efectuaron como para los residentes», exponen porque el sistema utilizado volvió a remover el polvo de talco que se había depositado en la calle.
Ellos proponen que se utilicen aspersores a modo de aspiradoras para retirar el talco y luego ya emplear agua.
En cualquier caso, la asociación de vecinos Triana-San Telmo considera que la celebración del carnaval en el casco histórico de la ciudad lo deteriora y lo degrada. «Hablamos con la experiencia acumulada en los últimos años», asegura Sánchez en el escrito, «es una sucesión de botellones realizados en sus calles hasta altas horas de la madrugada, con el añadido de basuras de todo tipo tiradas por sus calles, otras drogas, vomitaduras y meadas en las calles y portales de edificios, en su mayoría nobles, catalogados como Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Canarias».
Los vecinos reclaman información también sobre las medidas previstas para garantizar que el derecho al descanso sea compatible con el ocio y esparcimiento ciudadano.
Javier Darriba
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