´Mi madre se puso de parto cuando cosía un diseño de mi padre´

Un año de ensueño. Ese debería ser el título de una película de Bollywood basada en Carmen Belén Castilla Rodríguez. La joven anhelaba desde siempre devolver a su padre el orgullo que sentía por él, por su creatividad. En el año de la cifra de la mala suerte, el azar cumple los deseos de Carmen Belén y la trasladará hasta el centro de las miradas de todos los carnavaleros. Pero como en toda cinta, el amor también tiene relevancia en el guión, que en este caso acaba con la boda de la protagonista el próximo mes de junio.
–¿Cómo llegó a ser candidata?
–Fue mi padre el que me lo propuso, que es el diseñador. Llevo desde los 18 años pidiéndoselo y este año las empresas estaban de acuerdo.
–Presentarse como candidata de su padre ¿da más responsabilidad o más tranquilidad?
–La responsabilidad es mayor porque quieres dejar a tu padre en un buen lugar, que le he visto trabajar tanto durante toda mi vida. Incluso mi madre se puso de parto mientras cosía uno de sus diseños.
–¿Habrá visto todo el proceso desde el boceto a la elaboración del traje?
–Sí, siempre los he visto. Ya estoy más que acostumbrada a pegar plumas y lentejuelas. Además, en las exposiciones, suelo servir de modelo. De hecho cada año lloro al ver en el escenario la fantasía de mi padre. Este año tendré que aguantarme.
–¿Cómo definiría el que lleva este año?
–Me gusta mucho, refleja bastante algunos acontecimientos de Canarias. Me lo pruebo a diario y ya lo único que me falta es arrastrar la estructura.
–¿Cómo se prepara para ser candidata?
–En realidad llevo toda la vida preparándome. Siempre me he probado los tocados y he llevado algunos trajes, así que ya sé lo que es. Además, aunque ni me acuerdo, me presenté en el 96 a Reina Infantil y quedé Dama de Honor. Espero tener la misma suerte este año.
–¿Qué cambiaría del Carnaval?
–Desearía que alguna gente no acabara las noches de fiesta como las acaba. Aunque es verdad que cada año se va mejorando.
–Si fuera letrista de murgas, ¿a qué le cantaría?
–A la mayoría de los políticos, da igual el partido, a todos aquellos que cogen lo que no les pertenece.
–¿Puede decir tres virtudes que le caractericen?
–Soy simpática, me gusta la diversión y, además, soy amable.
–¿Y tres defectos?
–Soy pesimista y muy nerviosa, cojo nervios por todo.
–¿Hay algo de lo que se sienta especialmente orgullosa?
–De ser la hija de Miguel Ángel Castilla.
–¿Cuál es el principal problema que cree que tiene España ahora mismo?
–La crisis y el paro. Hay mucha gente a punto de perder su casa o incluso ya en la calle. Estas navidades me sorprendió ver un reportaje en la que una madre se vio obligada a decirle a sus hijos que los Reyes se olvidaron de pasar por su casa. Los pequeños son los más afectados porque su ilusión no entiende de crisis.
–¿Se operaría de algo?
–Del pecho, siempre lo he dicho y quizá no lo he hecho por falta de presupuesto. No es que tenga complejo pero sí que me gustaría tener más.
–Si fuera alcaldesa de Santa Cruz, ¿qué cambiaría del municipio?
–Quitaría el charco de la Plaza de España que no se entiende que han pretendido con eso. Además, le daría más vida a la ciudad porque los miles de cruceristas que llegan se encuentran con una Santa Cruz muerta.
–¿Cuál es el siguiente sueño por cumplir?
–Casarme, porque siempre he sido muy familiar y en el futuro quiero tener hijos. Ya queda nada para que cumpla esta ilusión porque ya tengo la fecha el próximo junio. La verdad es que este año está siendo el de mis sueños.
 María Plasencia