
Rubén Tenesor Pérez, más conocido en el mundo de la danza como Rubén T, lo tenía claro desde pequeño. Aunque por aquel entonces disponía de una concepción completamente distinta de lo que hoy, además de su pasión, es su profesión. Este año ha sido elegido para diseñar y montar las coreografías de las galas de elección de la Reina y Drag del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria 2016.
Cuando con 8 años su madre lo llevó por primera vez a clases de baile con Lorenzo Godoy, se levantó el telón de su trayectoria personal. Una coreografía cuyos movimientos ha ido plasmando a base de sacrificio y dedicación. Desde entonces no ha parado de bailar y coreografiar. Primero formándose en escuelas en Las Palmas, después con becas en el extranjero, en Madrid y Barcelona, posteriormente como bailarín profesional y, finalmente, a través de su escuela de danza en Telde, en la que lleva impartiendo su buen hacer desde hace ya 14 años.
¿Por qué el baile y no otra cosa?
Porque eso es innato. Desde pequeño estaba bailando, y quería que me vieran como bailaba, mostrar mi trabajo siempre. Sigo sintiendo eso, que lo que quiero es mostrar con mis alumnos de danza lo que estoy enseñando.
¿Danza o baile?
Danza. Baile es moverse, te puedes mover de cualquier manera. Pero danza ya es sentir, pulir los movimientos, y hay un trabajo detrás. Cualquiera que tenga un poco de ritmo puede bailar. Un gogó baila, por supuesto. Pero danza significa que estamos estudiando esos movimientos, nuestro cuerpo es nuestro instrumento, y a partir de ahí lo afinamos y bailamos.